Sobre Mi

Me titulé como Abogada y trabajé mayormente en el ámbito Penal. En mi trabajo dentro de los juzgados me di cuenta que además de lo legal, es importante liberarnos del dolor y limitaciones, y crear espacios para potenciar nuestras capacidades. Así fué como cursé la Maestría en Terapia Familiar Sistémica, y los entrenamientos en Contención de Carencia Materna, las Técnicas de Liberación Emocional (EFT), Kinesiología Aplicada E2C (Encontrando y Eliminando la Causa), Sanación Emocional, el Diplomado en Prevención, Detección y Atención de Abuso y Maltrato infantil, además de Talleres de Sexualidad, Pareja, Prevención de la Violencia Intrafamiliar y Equidad de Género. Actualmente soy Certificada como Formadora EFT!

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jueves, 26 de abril de 2012

Recobrando la Esperanza



Hay momentos de la vida en que vivimos situaciones que nos sacan la vida, nos la succionan sin que podamos hacer nada al respecto, y nos sentimos pequeños e inválidos para protegernos. Todos sin excepción pasamos por momentos así en algún momento de nuestra existencia y las reacciones ante ello están condicionadas por nuestras creencias.
Creemos que somos poderosos y fuertes, valientes y capaces, amorosos y libres, hasta que las tormentas llegan y arrazan con este aparente control y autoconocimiento... y entonces comienza el verdadero autodescubrimiento de nuestro poder y fortaleza, valor y posibilidad, pues precisamente en el reconocimiento de nuestra debilidad es que comenzamos a ser verdaderamente fuertes, en el rendirnos nos encontraremos para, poco a poco y de modos misteriosos nos recuperamos y recobramos la experiencia de nuestro ser.
El reconocer es un primer paso pero... ¿y luego?, sigue entonces el liberarnos de las capas de heridas emocionales de nuestra vida que nos llevaron en esta tormenta que hoy vivimos a este estado de ________ (indefensión, miedo, tristeza, dolor... ponle el nombre que tu tengas a ese sentimiento).

Y es aquí donde las grandes tragedias se convierten en oportunidades de volvernos diamantes verdaderos, cuando nos miramos con nuevos ojos, no desde la cabeza racional que "sabe" que podemos y somos grandes, sino desde la experiencia interna, desde la luz que nos guía, desde nuestra sabiduría innata que desperamos y nos vemos y nos damos cuenta, que aquello que creíamos enorme, que nos parecía infranqueable no lo es, y nos damos la oportunidad de mirarlo de frente parados en nuestra integridad.
Recobrar nuestro poder es un proceso que requiere que pongamos límites saludables a las personas y situaciones insalubres de nuestras vidas. Decir "no" muchas veces nos vuelve a los ojos de los demás personas menos "agradables", pero mas auténticas, y es en la autenticidad donde podemos disfrutar nuevamente de lo que nos rodea.
És algo sencillo, no es fácil y nos tomará tiempo, pero vale la pena intentarlo. Hacer el ejercicio de mirar con cuidado como hemos sido sostenidos en nuestra hisoria anteriormente, como seguimos siendo sostenidos hoy, es signo irrefutable de que seremos sostenidos en el futuro.

Así que te invito a encontrar ese manantial diario refrescante, ese que te provea de los signos de esperanza para continuar sanando tu vida. Tu vida, y tu salud si la tienes, o lo que conserves de salud el día de hoy. Lo que si existe, lo que si puedes, lo que si has hecho, lo que si has logrado... el mero hecho de respirar, de estar leyendo esto, es señal de que hay varias cosas sosteniendo hoy tu vida, mas todas las que no vemos!, como el aire que respiramos, las estaciones, el agua que tomamos... hay tantas cosas rodeándonos sosteniéndonos, miles de factores tejiendo situaciones a cada instante para que nuestra vida siga siendo posible!!! Hazlo y cuéntame que tal!!
Un abrazo de Paz y Luz!

Carolina Téllez Estrada.
Terapeuta Familiar Sistémico.